El 13 de julio del año 2014, el cuerpo de Conrad Roy III fue hallado en su camioneta en un estacionamiento en Massachussetts, Estados Unidos.
Se determinó que se había suicidado por asfixia con monóxido de carbono.
Conrad Roy, tenía 18 años cuando murió, sufría de ansiedad y depresión. Michelle Carter, de 17 años en ese momento, era su novia a larga distancia.
La pareja se conoció en el año 2012 en Florida mientras vacacionaban con sus familias, y tenían una relación a larga distancia, basada principalmente en mensajes de texto, a pesar de vivir a solo una hora de distancia entre sí.
Una investigación realizada por las autoridades encontró una serie de mensajes entre Roy y Carter en las semanas previas a su muerte. Los mensajes mostraban que Carter había alentado a Roy a suicidarse.
El día de la muerte de Roy, Carter le envió un mensaje que decía: “Sigues insistiendo y dices que lo harás pero nunca lo haces. Siempre será así si no tomás medidas”.
Una investigación realizada descubrió que Roy le había confesado a Carter en junio de aquel año que tenía pensamientos suicidas. Le dijo a Carter que “deberían ser como Romeo y Julieta”, a lo que Carter respondió: “NO NOS VAMOS A MORIR. No es gracioso. Pensé que tratabas de ser romántico”.
Sin embargo, su tono cambió más tarde aquel mismo mes, pues comenzó a sugerirle a Roy diferentes formas de suicidarse. Luego de que Roy le dijera que “iba a hacerlo” el 3 de julio del 2014, Carter le aseguró que el monóxido de carbono era “la mejor opción”.
“Será mejor que no me estés mintiendo y diciendo que vas a hacer esto y que luego te atrapen a propósito”, escribió Carter. También le pidió si podía decirle a la gente que era su novia cuando muriera.
Conrad Roy habló con Michelle Carter por teléfono antes de morir y los detectives descubrieron lo que se dijeron gracias a un mensaje que Carter envió a una amiga: “Podría haberlo detenido. Estábamos hablando por teléfono y salió del carro porque estaba funcionando y se asustó y le dije que volviera a subirse. Pude haberlo detenido pero no lo hice. Todo lo que tenía que decirle era te amo”.
En febrero del año 2015, Michelle Carter fue acusada de homicidio involuntario, que consiste en matar a alguien de manera ilegal pero no intencional.
En su juicio en el mes de agosto de 2017, Michelle Carter fue declarada culpable de homicidio involuntario y sentenciada a dos años y medio de prisión, pero el juez Sr. Moniz solo ordenó que 15 meses de la condena fueran obligatorios.
También fue sentenciada a cinco años adicionales de libertad condicional. Inicialmente se le otorgó una “suspensión de la ejecución de su sentencia” y terminó comenzando su tiempo en la cárcel en febrero del año 2019.
Sin embargo, Michelle Carter terminó cumpliendo solo 11 meses de su sentencia debido a su buen comportamiento y fue liberada en enero del 2020.
Un portavoz de la Oficina del Sheriff del Condado de Bristol dijo en ese momento: “La señora Carter ha sido una reclusa modelo en el condado de Bristol. Ha asistido a diversos programas, tenía un trabajo dentro de la cárcel, ha sido cortés con nuestro personal y voluntarios, se ha llevado bien con otras reclusas y no hemos tenido ningún problema de disciplina con ella”.
Michelle Carter ha mantenido un perfil bajo desde que salió de prisión. Las condiciones de su liberación significaron que estuvo en libertad condicional hasta el año 2022, por lo que es poco probable que haya salido de EE.UU.
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