viernes, 7 de enero de 2022

Suicidio Inspirado en La Vida de David Gale

 


La Vida de David Gale es una obra cinematográfica protagonizada por Kevin Spacey, Kate Winslet y Laura Linney. Tras una dura y ardua lucha de su abogada por demostrar la inocencia del protagonista, finalmente cae de sorpresa cómo en un video doméstico éste se autograba mostrando cómo la víctima se suicida colocándose una bolsa de basura en la cabeza y atandose las manos. Todo eso con la pasiva mirada del activista que está grabando la cinta. Cuando Mario Miralles Tormo fue hallado muerto en su domicilio en la localidad valenciana de Ontinyent, tenía las manos atadas a la espalda con una comba y su cabeza estaba cubierta con una bolsa de basura, ajustada a la altura del cuello, con varias vueltas de cinta adhesiva americana de color gris. Su casero fue avisado por los vecinos al desprenderse un fuerte olor de la vivienda, un olor a muerte tan desagradable como penetrante, por lo que el hombre acudió con una copia de la llave y esperó a que un policía local entrara en el piso. El macabro hallazgo tuvo lugar el 11 de septiembre de 2012. El cuerpo estaba en avanzado estado de putrefacción, tumbado en posición decúbito supino sobre la cama de un dormitorio, y vestido solo con un calzoncillo ajustado y una camiseta de color negro.

Tras realizarle la autopsia, el forense determinó que la causa de la muerte fue asfixia mecánica por sofocación. La víctima no presentaba heridas de defensa ni otras marcas de violencia en su cuerpo, como hematomas o erosiones, y el análisis toxicológico del cadáver resultó negativo en sustancias estupefacientes y alcohol. Los policías que inspeccionaron la casa de Mario hallaron evidentes signos de registro en los muebles, aunque algunos cajones y estantes de armarios estaban intactos. Todas las ventanas y puertas de la vivienda se encontraban cerradas sin signos de forzamiento, y había una llave en el suelo frente a la entrada, una maleta con una etiqueta de un vuelo Roma-Valencia con la cerradura forzada, una botella de vino vacía, platos, cubiertos limpios y dos vasos en el fregadero de la cocina.

Escena final del suicidio grabado, La Vida de David Gale 


Pues en esta película se inspiró Mario Miralles Tormo para suicidarse,  y también con una ardua investigación policial quien finalmente encontró las evidencias dentro de la casa y sobretodo la prueba clave, una cinta DVD del film La Vida de David Gale. Ocurrió en Ontinyent, en la comunidad valenciana en septiembre del 2012.

Mario Miralles Tormo 


En un principio las investigaciones se centraban en una hipotética acción de robo, dado el estado del interior de la vivienda,  estaba todo revuelto,  pero meticulosamente los investigadores fueron encontrando pruebas claras de que allí no se había producido ningún hecho por terceras personas ajenas a la víctima y sí la acción de un suicidio. 

Mario Miralles, de 38 años de edad, había trabajado en los últimos diez años en una firma textil, Dobeltex S.L., ubicada en Bocairent, municipio al que se trasladó desde Ontinyent unos cuatro años atrás, en 2008.

Una empleada de la firma explicó que Mario, quien estudió Ingeniería Técnica Textil en Alcoi, trabajaba en el departamento de producción de Dobeltex y que a mediados del mes de junio del 2012 había roto su relación laboral con esa empresa de manera voluntaria.

La hipótesis del robo -o el intento de robo- cobró fuerza no sólo porque la casa estaba revuelta y había señales claras de que alguien había revuelto y rebuscado en cajones y armarios, sino porque quien intervino en la muerte debía ser alguien conocido por la víctima. La sospecha se fundamentó en el hecho de que la puerta de acceso al piso,  en el 59 de la avenida de l'Almaig de Ontinyent, no estaba forzada y que las llaves estuviesen caídas dentro, al pie de la puerta.

A menos que Mario se hubiese visto sorprendido y amenazado en el momento de entrar en casa y que su asesino o asesinos hubiesen entrado con él, sólo cabía pensar que esa persona o personas generaron suficiente confianza en él como para franquearle el paso.

Pero las evidencias y los indicios fueron tomando cuerpo y 16 meses después se halló la razón de esa muerte.

La Policía Nacional esclareció la extraña muerte de Mario Miralles Tormo en Ontinyent tras una ardua investigación que duró 16 meses. El 11 de septiembre del 2012, el hombre fue hallado muerto en su domicilio con una bolsa de basura en la cabeza y las manos atadas a la espalda.



El Grupo de Homicidios desveló que Mario Miralles se quitó la vida de forma voluntaria sin la participación de ninguna otra persona.

Mario Miralles tenía 38 años y, aunque era natural de Albaida, trabajaba en la localidad de Bocairent. El cadáver fue hallado sobre una cama y estaba en estado de putrefacción. 

Los vecinos dieron la voz de alarma debido al hedor que procedía de la casa.

Las persianas de la habitación estaban completamente bajadas, y la vivienda se encontraba revuelta. La Policía Nacional investigó si el hombre murió durante un robo, pero se descartó esa hipótesis tras examinar de forma minuciosa la casa y el cadáver. Los resultados de la autopsia también arrojó luz al caso, la forma en la que estaba colocada la bolsa, las cintas adhesivas y la separación de las manos atadas. La Jefatura Superior de Policía de Valencia afirmó que los investigadores estuvieron totalmente convencidos de que el hombre se habia suicidado inspirándose en la cinta cinematográfica de La Vida de David Gale. 

Los agentes de la Policía Científica también hallaron un sobre vacío, el rollo de cinta adhesiva utilizada para amordazar a la víctima y unas tijeras. Los tres objetos estaban bajo la cama donde apareció el cadáver. Tras analizar la escena de lo que parecía una muerte violenta, la Policía barajó hasta ocho hipótesis homicidas. Un ajuste de cuentas relacionado con un asunto delictivo, un posible robo con torturas a la única persona que vivía en el piso o un crimen pasional fueron algunas de las suposiciones que consideraron los investigadores. Analizaron las últimas llamadas que realizó Mario, comprobaron los movimientos de su cuenta bancaria, tomaron declaración a familiares, amigos y compañeros de trabajo, visionaron grabaciones de cámaras de seguridad, y lograron extraer datos borrados de su ordenador portátil y su teléfono móvil. El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional de Valencia realizó una exhaustiva investigación para reconstruir las últimas horas de vida de la víctima, y no encontró ningún indicio que permitiera relacionar su muerte con alguna de las hipótesis criminales.
Todo lo que sus familiares, amigos y compañeros de trabajo conocían de Mario eran mentiras entretejidas que formaban diferentes escenas de su vida convertida en una obra de teatro hasta el día de su muerte. Meses antes de que fuera hallado muerto, Mario comentó en su entorno que tenía mucho dinero ahorrado para crear una empresa de tapizado de coches en Italia, y verano tras verano evitaba acudir a las reuniones de su familia en Bocairent con el pretexto de que iba a reunirse con unos amigos en el país transalpino. Sin embargo, la Policía comprobó que no había viajado en los últimos años a Italia, y también verificó que ningún contacto de su teléfono móvil era de este país, y tampoco había correos electrónicos en su ordenador relacionados con los supuestos viajes. El 19 de junio de 2012, Mario entregó al gerente de la empresa textil Dobeltex una carta de despido voluntario por motivos personales, y renunció a cualquier tipo de compensación económica a la que pudiera tener derecho. Llevaba trabajando diez años como encargado de los telares, cobraba unos 1.700 euros al mes y su decisión de dejar la empresa fue inesperada. Como había tenido peleas verbales con sus compañeros de Dobeltex, la Policía investigó el entorno laboral de la víctima e incluso cotejó huellas y perfiles de ADN de todos los trabajadores de la empresa con los restos biológicos encontrados en el piso de Mario. El resultado negativo de los análisis posibilitó descartar otra de las hipótesis homicidas. Ningún compañero de trabajo estaba relacionado con la extraña muerte. El caso se estaba convirtiendo en un rompecabezas y un quebradero con dosis de acto macabro. La Policía descubrió que uno de sus antiguos vecinos pertenecía a una banda de traficantes de hachís, por lo que investigó la hipótesis de un crimen por error. La posibilidad de que uno o varios individuos hubieran asaltado la vivienda para buscar drogas al confundirlo con un traficante era lejana e inverosímil, pero fue comprobada y descartada por los agentes del Grupo de Homicidios. Un vecino del mismo edificio encontró una bolsa con paquetes de hachís (en el doble fondo de un armario) en el piso que había alquilado. Este hallazgo de droga tampoco tenía ninguna relación con la víctima. Otro acto inquietante fue cuando días antes de la muerte de Mario, su madre notó un comportamiento inhabitual. La única llamada telefónica con relevancia para la investigación la hizo sobre las nueve de la noche del 1 de septiembre para felicitar el cumpleaños a su progenitora. La conversación duró pocos minutos, pero la mujer notó que su hijo podría tener algún problema y lo comentó con otro familiar: «Algo le pasa a Mario». La casera declaró a la Policía que llamó a Mario el 3 de septiembre y el teléfono comunicaba o estaba fuera de cobertura, y volvió a intentarlo una o dos veces el día 5, pero nadie respondió. Tras el hallazgo del cadáver el 11 de septiembre en su domicilio en la calle Almaig de Ontinyent, la Policía Científica realizó una minuciosa inspección en la vivienda y los agentes del Grupo de Homicidios iniciaron las primeras investigaciones en el círculo de amistades de la víctima y su entorno familiar. Los policías consideraron como hipótesis de trabajo que la muerte de Mario pudiera tener su origen en alguna relación sentimental que habría acabado de forma traumática. A sus familiares y amigos les había hablado de alguna novia, pero llegaron a pensar que inventaba los romances, ya que nadie llegó a conocer a ninguna. En su pandilla bromeaban incluso sobre su posible homosexualidad, aunque a Mario no le gustaban los hombres. También hizo creer a sus compañeros de trabajo que estaba casado con una médica originaria de Gandia. La Policía comprobó que era falso y constató que no tenía pareja.
Sus vecinos poco sabían de él. Su rutina diaria consistía en ir a trabajar y ver películas en la tele. Algunos días salía a correr por la zona de la empresa Dobeltex en Bocairent para hacer deporte, pero volvía al mediodía a Ontinyent para comer en casa y regresaba al trabajo por la tarde. Los únicos amigos a los que veía de vez en cuando, aunque en ocasiones señaladas, eran los de su infancia, una pandilla de Albaida que se autodenomina 'L'Equip'. Dos años después de la muerte, los agentes del Grupo de Homicidios, que no dejaron de realizar averiguaciones durante ese tiempo, lograron encajar todas las piezas de lo que parecía un rompecabezas macabro. El caso criminal que investigaban era en realidad un suicidio escenificado como homicidio. La Policía llegó a esta conclusión y la motivó en un informe de 50 páginas que remitió al juez. El hombre solitario y cinéfilo, incapaz de asumir que su familia y amistades conocieran la frustración que supone dar fin a su vida, se planteó su muerte como una mentira más de las que conformaban su vida y trató de ocultar su suicidio. Tras analizar las pruebas desde una nueva perspectiva, los investigadores comprobaron que Mario preparó la escena con la intención de hacer creer que alguien había acabado con su vida de un modo violento. Todo lo que su familia, amigos o compañeros de trabajo conocían de él eran mentiras entretejidas, en su mayoría, que formaban diferentes escenas de su vida convertida en una función de teatro. Para su familia, Mario era un empresario textil, accionista de Dobeltex, con una economía solvente, tenía varias novias y estuvo a punto de casarse con una de ellas, todo era falso, actuación. Solo era un empleado mediocre de la empresa de Bocairent y no tenía ahorros. Tampoco viajó a Italia ni era ingeniero ni había comprado una nueva casa, y los coches de alta gama con los que acudía a las celebraciones familiares los alquilaba unas horas antes. Actuaba siempre como si le sobrara el dinero, presumía de llevar un nivel de vida alto y era muy orgulloso. Como nunca hubiera admitido sus mentiras ni hubiera aceptado volver a depender económicamente de sus padres, llegó a un punto sin retorno (ya no tenía trabajo, dinero ni vivienda) y tomó una decisión drástica para no reconocer que todo en su vida era una comedia. Su crisis vital le empujó a tomar la decisión de quitarse la vida, pero no lo hizo como un suicidio cualquiera. Mario continuó hasta el último momento con su teatro y quiso aparentar lo que no era hasta el día de su muerte. Como había hecho creer a todo el mundo que había viajado a Italia de vacaciones en agosto, siguió su plan de simulación de homicidio y dejó un sobre vacío bajo la cama y una maleta abierta con ropa dentro como si alguien le hubiera robado dinero cuando regresó del viaje. Las conclusiones de los policías de Valencia y Madrid coincidieron: suicidio escenificado como homicidio. Mario simuló que un asaltante le ató las manos, le amordazó y le cubrió la cabeza con una bolsa de plástico con el propósito de acabar con su vida. Todos sus amigos lo definen como una persona fantasiosa. Uno de ellos comentó a la Policía que Mario había muerto como había vivido: en una película. Y no le faltaba razón. ¿Pero de dónde tomó la idea de suicidarse de una manera tan elaborada? Los investigadores revisaron el caso y encontraron la última pieza que encajaba en el macabro rompecabezas: la película 'La vida de David Gale' que encontraron entre sus cintas de DVD en el salón de su casa. El canal Fox Crime estrenó el 29 de mayo de 2012 en abierto para todos sus clientes, entre ellos Mario Miralles Tormo, la película 'La vida de David Gale' y la emitió durante los meses de mayo y subsiguientes de 2012. La trama principal de este filme gira en torno a un crimen que resulta ser un suicidio. Una mujer simula su asesinato con el mismo método, paso por paso, que siguió Mario. El parecido es asombroso. La actriz se amordaza con cinta adhesiva, coloca una bolsa de basura en su cabeza, que ata alrededor de su cuello, y luego inmoviliza sus manos a la espalda con unos grilletes. La única diferencia es que Mario se ató con la cuerda de una comba, ya que era más complicado conseguir unas esposas.
El informe del Grupo de Homicidios capitaneado por Juan Enrique Soto Castro, concluyó que no cabía duda de que se inspiró en la película para simular su asesinato, y afirma también que es muy probable que viera el filme en varias ocasiones para copiar bien el método. El suicidio de Mario Miralles Tormo fue la última escena de la obra de teatro de su vida.

6 comentarios:

  1. La persona que aparece en la foto con la taza no es Mario Miralles Tormo.

    Revisen sus fuentes.

    Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por su estimable mensaje, nuestra fuente, Juan Enrique Soto, prestigioso experto policial e inspector que estuvo en la causa de forma presencial es quien nos aporta la identidad y fotografía del desafortunado.

      Eliminar
  2. A mí se me escapa una cosa, si en teoría era un hombre sin vicios, ¿por qué tenía su cuenta a cero? ¿en qué gastó todo su dinero a lo largo de su vida?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenas tardes; Se investigó todo y entre ello estaba la constancia de que tenía sus activos financieros en orden, de manera correcta y sin nada que hiciera alertar algo sospechoso. Mario Miralles Tormo tenía sus cuentas bancarias sin alterar y con unos ahorros normales.

      Eliminar
  3. Buenas noches, soy el anónimo de. Antes.
    He estado leyendo en distintas fuentes y no concuerdan con lo que usted me está diciendo de que tenía sus cuentas bancarias sin alterar. Le copio un texto extraído de otra página:

    "Tras despedirse de sus compañeros, probablemente con la idea de suicidio ya en su cabeza y sin expectativas de conseguir otro trabajo, apenas se relacionó con sus amigos ni familiares en su último mes de vida. El 27 de agosto sacó 30 euros del cajero automático, y su cuenta bancaria quedó a cero el 1 de septiembre. El dinero del finiquito laboral que ingresó a primeros de julio y sus ahorros ya se habían esfumado."

    ResponderEliminar
  4. Buenos días estimado lector anónimo, en este caso de ser cierto así, estaba ya pensado de que iba a suicidarse, sacó su poco o mucho dinero para darle un último disfrute antes de morir.

    ResponderEliminar

Comente usted que impresion o que sabes del tema referido?