El Crímen de Castro Urdiales, No es Una Película de Terror,Es Real

Castro Urdiales, en Cantabria, se vió sacudido por un macabro crimen que bien puede salir en una película de terror. El viernes 27 de septiembre del 2019, una vecina de la localidad llamó a las autoridades alertando del hallazgo de una cabeza humana en una caja que guardaba en su vivienda.
Fue una amiga suya, María del Carmen Merino Gómez (62 años), quien le hizo entrega del bulto semanas atrás tras decirle que contenía juguetes eróticos. La pareja sentimental de su amiga, el banquero bilbaíno Jesús María Baranda, de 67 años, permanecía en paradero desconocido desde el pasado 11 de abril y no quería que la Guardia Civil encontrara sus juguetes sexuales si efectuaban un registro en su vivienda.

La vecina accedió y guardó la caja, que estaba envuelta en papel de regalo, hasta que empezó a desprender un fuerte hedor. Fue entonces cuando la abrió y descubrió que en su interior había un cráneo humano sin ningún resto de tejido.
En shock, la mujer llamó a la policía para alertar del macabro hallazgo. Los agentes la encontraron conmocionada y tras recibir asistencia médica, llamó a María del Carmen para revelarle que había descubierto el contenido de la caja y ésta le dijo que se dirigía a su casa, a lo que respondió: “No hace falta, ahora van a buscarte a ti”. Poco después, la sospechosa fue detenida.

 El arresto se efectuó en la vivienda de la sospechosa, en la calle Padre Basabe de Castro Urdiales. Sobre su implicación con el cráneo hallado, la detenida explicó que alguien dejó la caja en la puerta de su casa. “La guardé porque era el único recuerdo que tenía de él”, declaró. El cráneo fue hervido en agua y envuelto en papel de aluminio.Hicieron falta varias semanas para que María del Carmen denunciara la desaparición de su pareja, con quien mantenía una relación desde hacía siete años. Explicó que la había abandonado, dando así a entender que la desaparición del hombre había sido voluntaria. En una segunda versión, apuntó que había notado que alguien la seguía y manifestó a las autoridades tener sospechas de que la desaparición de su pareja sentimental era resultado de un ajuste de cuentas.
La unidad de Criminalística de la Guardia Civil investiga si el cráneo corresponde a la pareja de la arrestada. Asimismo, investiga si la cabeza fue tratada con alguna sustancia química y las autoridades trabajan para localizar el resto del cuerpo.
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Castro Urdiales acordó como medida cautelar la prisión provisional comunicada y sin fianza a la principal sospechosa de la desaparición de Jesús María Baranda.
 

 

Carmen Merino Gómez, 62 años, nació en Cádiz y se trasladó a Castro Urdiales en el 2011. Los vecinos la conocían por su manera de ser tan llamativa, impartía clases de baile y estaba involucrada con la Casa de Andalucía de la comarca.
He conseguido dar con el pasado oscuro de la presunta asesina, que degolló y coció la cabeza de su marido para dársela posteriormente, introducida en una caja, a su amiga María.
He conocído que la presunta autora del crimen contaba con dos antecedentes policiales en su historial delictivo.
 Carmen fue denunciada en 2013 por robar 300 euros en el domicilio de un familiar. Cuatro años más tarde, en 2017, la detenida estafó 6.000 euros a la expareja de un familiar.

"Nunca te imaginas que personas normales puedan hacer estas cosas"

Los vecinos de la pareja en Castro Urdiales consideran que cada dato que transciende del caso es para ellos "aún más sorprendente". "Es algo que está impactando en el municipio", indica Gerardo Martínez, uno de los residentes que conocía de vista a María del Carmen y Jesús María, y quien espera que "pronto se conozca la verdad de todo este asunto" porque la gente está "consternada".
"Menudo susto se tuvo que llevar la chica cuando abrió la caja por el olor que desprendía y se percató de que se trataba de una cabeza humana", señala Marta Gutiérrez, quien vive cerca de donde residía la pareja.