Blogoteca en 20minutos.es

viernes, 5 de noviembre de 2021

El Asesinato a Samuel Luiz, Fruto de la Vergonzosa Sociedad de Extrema Homofobia

 


Lo sucedido en la madrugada del día 3 de julio del 2021 se puede calificar como fruto de la vergonzosa sociedad generada y también incentivada por esas voces de la extrema derecha política que por culpa de ella misma, la sociedad que los vota en elecciones,  hablan contra la diversidad,  la multicultura, las personas extranjeras,  nacidas fuera de territorio estatal, contra la LGTBI,  y abanderan el rancio y caduco discurso de la bandera nacional al son del cara al sol y con el grito de una España única y grande, que no cuela ya en el siglo XXI,  porque el fascismo siempre representa a la muerte, desde tiempos inmemoriales.  

Samuel Luiz Muñiz era una bella y hermosa persona,  nació en Brasil en 1997, fruto de la unión entre Maxsoud Luiz, brasileño, y Lola Muñiz,  gallega de Borroa. Samuel trabajaba como auxiliar de enfermería,  muy querido entre sus amistades, más conocido como Samu. 

Con un año de edad llegó a España con su familia.​ A los 18 años inició sus estudios en el  Instituto de Formación Profesional Ánxel Casal de A Coruña, donde cursó el grado técnico de auxiliar de enfermería, comenzando a trabajar a los 20 años en la residencia de la Fundación Padre Rubinos, en La Coruña. En 2021 residía en el barrio de Meicende (Arteixo), siendo conocido por su temperamento solidario, tranquilo y personalidad pacífica. Era miembro de la Congregación Cristiana, un grupo evangélico donde participaba activamente y era guía espiritual de otros feligreses. También colaboraba con la Cruz Roja Española. Mientras trabajaba como auxiliar de enfermería estudiaba por las tardes para profesionalizarse como protésico dental.



A los 24 años, estaba estudiando para obtener su título de técnico dental, dedicando gran parte de su tiempo y energía a su carrera universitaria. Por su trabajo en la Fundación Padre Rubinos, Samuel fue uno de los profesionales sanitarios que venía afrontando la pandemia de COVID-19 en primera línea durante más de un año, con un impacto especialmente fuerte en España y en las instituciones de atención y salud a ancianos. Según sus compañeros de trabajo, era muy querido por los usuarios de la institución.Ayudó a sanar a muchos pacientes,  llegando a salvar vidas en los duros momentos de la pandemia en sus picos más críticos y graves, Samu fue un héroe.

El ocio nocturno estuvo cerrado durante más  de 10 meses como medida de control de contagios provocados por la pandemia de COVID-19. Tras la reapertura el jueves 1 de julio de 2021, Samuel aprovechó la apertura para salir con un grupo de amigos cercanos al pub denominado El Andén, situado en el paseo marítimo de la playa de Riazor.

Habiendo superado la primera noche las expectativas, Samuel volvió a salir a la misma zona la noche del viernes 2 de julio, con otro grupo de amigos, concretamente al mismo establecimiento, donde permanecieron hasta cerca de las 3:00 de la madrugada, tiempo límite de apertura decretado por las autoridades.​ A las 2:50, Samuel y Lina, una de las amigas con las que había acudido a El Andén, salieron del pub para hacer una videollamada con Vanesa, la pareja sentimental de Lina, alejándose escasos metros de la puerta del club nocturno, en las afueras de la Avenida Buenos Aires, dejando a otros dos amigos dentro del establecimiento.

Durante la videollamada Samuel estaba emocionado ante la posibilidad de poder salir de nuevo por la noche, y trató de convencerla de que se uniera a él y volviera a salir la noche siguiente, un sábado. La conversación continuó animadamente, con Lina y Samuel relatando a Vanesa episodios divertidos que habían sucedido durante la noche, hasta que decidieron mostrarle a Vanesa dónde estaban, dando la vuelta al teléfono móvil. En ese momento pasaron junto a ellos una pareja, Diego y Keta, de aproximadamente la edad de Samuel. El chico, observando que el móvil estaba orientado hacia ellos, les gritó que dejaran de grabarlos. Pero pensaron que Samuel grabó a las chicas que acompañaban al grupo donde se encontraba esta pareja.


De inmediato, Samuel y Lina explicaron al joven que era un malentendido y que solo estaban en una videollamada con Vanesa, quien aún estaba en línea. Sin prestar atención a las explicaciones, Diego se dirigió directamente a Samuel y le dijo «O paras de grabar o te mato, maricón». Según Vanesa y Lina, Samuel, quien nunca se había avergonzado de su orientación sexual, solo pudo responder «¿maricón de qué?» antes de recibir un puñetazo. Lina empezó a gritar. El vídeo de la videollamada se bloqueó, pero el sonido siguió funcionando, permitiendo a Vanesa escuchar el ruido de los golpes y agresiones, así como a Lina gritar: «¡déjalo, es mi amigo, por favor, déjalo!». Al principio Keta trató de separarlos, pero cuando Lina también intervino, la chica la alejó agresivamente. En ese momento un joven senegalés , Ibrahima, intervino para tratar de impedir que el agresor continuase golpeando a Samuel. Lo que logró que este se retirara del lugar.



Cuando el agresor se fue, Samuel, con visibles contusiones en el rostro, pidió a Lina que buscara su móvil, que se había caído durante la paliza. Lina empezó a buscar el dispositivo, dejando a Samuel con Ibrahima. Mientras buscaba el móvil, Diego y Keta  volvieron acompañados de otras doce personas, quienes aprovecharon la oportunidad para acorralarlo y golpearlo hasta dejarlo inconsciente, escuchándose gritos de «¡maricón de mierda!». Al menos cuatro personas siguieron pateando a Samuel hasta que dejó de moverse.​ Lo patearon y persiguieron durante 250 metros desde el pub hasta el n.º 2 de la avenida de Buenos Aires, donde continuó el ensañamiento durante 15 minutos, sobre todo con patadas en la cabeza.​ Cuando Lina logró alcanzar a Samuel, ya que ésta estuvo acorralada y retenida por el grupo de Keta, el joven estaba en el suelo al otro lado de la calle, donde había tratado de defenderse alejándose de sus agresores. Al ver que la víctima no se movía ni reaccionaba, los atacantes huyeron del lugar. El senegalés Ibrahima Shakur fue uno de los pocos ciudadanos que intentaron detener la paliza apartando a los agresores.



La policía pudo confirmar con rapidez, a través de los teléfonos móviles, la identidad de la mayor parte de los agresores, mayores de edad en su mayoría. A todos ellos se les interrogó de forma separada para contrastar las versiones ofrecidas de cada uno sobre el caso. Antes de la llegada de la ambulancia que atendió a la víctima, Samuel recibió la ayuda ciudadana de varias personas que se encontraban a esa hora cerca del lugar del suceso. ​



Samuel mostraba multitud de hematomas, especialmente en la cabeza y el pecho.​ Al lugar llegó una patrulla de la Policía Nacional, quienes llamaron a una ambulancia. El personal sanitario trató de reanimar al joven durante dos horas, sin éxito. Samuel fue trasladado en ambulancia al Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña, en donde sólo se pudo confirmar su deceso.



Las grabaciones permitieron identificar a las 10 personas que persiguieron a Samuel Luiz aquella noche a la salida del pub El Andén durante seis minutos y a lo largo de 250 metros.  Fueron  seis acusados de homicidio o asesinato (la única mujer es Keta) quienes se implicaron en la paliza. Los otros cuatro, que se acercan y alejan intermitentemente del tumulto, se arremolinaron alrededor de los presuntos homicidas solo con la morbosa intención de presenciar la agresión. Cinco son adultos y de ellos cuatro están entre rejas. Los dos que son menores permanecieron recluidos en un centro de internamiento y uno de ellos es el único con antecedentes.



Además de ratificar que Diego,Keta y Alejandro capitanearon la paliza mortal, en las imágenes se puede apreciar cómo Kaio le suelta una patada a Samuel Luiz. 

El tratamiento de las imágenes también propició la última detención. Alejandro de 25 años y sin antecedentes, fue enviado a prisión a finales de septiembre del 2021, casi tres meses después que el resto de implicados, pero la policía lo tuvo vigilado desde julio. Sospechaban los agentes que él también formaba parte del grupo agresor, aunque solo tenían constatado, por la declaración que prestó como testigo, que había estado presente en las reuniones que celebraron sus amigos aquella noche tras dejar herido de muerte al joven. 




No hay comentarios: